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lunes, 5 de noviembre de 2012

¿Te gusta la comida mexicana?



"El mole, como la cocina mexicana, es una creación colectiva, producto de un sincretismo cultural que no surgió de la noche a la mañana, ni se creó por una sola persona. Pertenece a la categoría de cocina popular ligada a los productos de la región, a la tradición oral preservada por generaciones, pero al mismo tiempo tiene un espíritu dinámico, innovador y refinado". El maravilloso nopal: sus propiedades alimenticias y curativas(1998). Cristina Barros y Marco Buenrostro.


En esta entrada vamos a hablar de una de las maravillas del mundo culinario, el mole poblano. En México se puede encontrar muchos tipos de mole, por ejemplo, mole verde, mole rojo, guacamole, mole michoacano, mole oaxaqueño..., pero el mole poblano es el que se reserva para celebraciones especiales. La palabra, en su origen, significa "mezcla" o "salsa", proviene del término náhualt mulli o molli,
pero en la actualidad los mexicanos, con esta palabra, se refieren a un grupo de platos o platillos, como dicen ellos, hechos a base de carne roja o ave preparadas en salsas que pueden ser sencillas o, como el mole poblano, complicadas.
Se dice que este delicioso platillo, casi negro, lo creó una monja en el convento de Santa Rosa en Puebla, en el siglo XVII, pero Cristina Barros y Marco Buenrostro en su libro "El maravilloso nopal" dicen: "Este guiso no nació en los conventos del siglo XVII, pues los indios ya tenían una cocina estructurada desde antes del arribo de los españoles, quienes enriquecieron nuestra mesa con sus viandas con influencias árabes"
Esta receta representa la unión culinaria entre el mundo español y el mexicano, pues originalmente mezclaba más de cien ingredientes de ambos continentes, además de especias exóticas provenientes de Asia.
Actualmente estos son los ingredientes más comunes que se utilizan para preparar el platillo:
chiles anchos, chiles mulatos, chiles pasilla, uvas pasas, cacahuate, en España, cacahuetes, plátano macho, pan, tortilla de maiz, semillas de ajonjolí, pipas de calabaza sin cáscara, semillas de anís,
semillas de cilantro, clavos, canela en rama, caldo de pollo o pavo, jitomates, almendras, cebolla, ajo, chocolate mexicano, sal y azúcar. Esto para la salsa que acompaña al guajolote (pavo) o al pollo.



Se pueden encontrar muchas recetas en la red.

Para acabar de ilustrar esta entrada os dejo un video de la famosa cantante mexicana Lila Downs. La canción se llama Cumbia del mole"




Aquí está la letra

Cuentan que en Oaxaca se toma el mezcal con café
dicen que la hierba le cura la mala fé
a mi me gusta el mole que Soledad me va a moler

Mi querida Soledad me va a guisar un molito
por el cielo de Monte Albán, de noche sueño contigo

Se muele con cacahuate, se muele también el pan,
se muele la almendra seca, se muele el chile y también la sal

Se muele ese chocolate, se muele la canela,
se muele pimienta y clavo, se mueve la molendera

Cuentan que en Oaxaca con agua es el chocolate
dicen que en la fiesta torito se ha de quemar
para el que haga su manda por la pasión de Soledad

domingo, 14 de febrero de 2010

¡Comer, comer!

Introducción
Vamos a descubrir la comida española. Vamos a descubrir su gran variedad. Para empezar vamos a contestar a estas preguntas: ¿Has probado alguna vez comida española? ¿Te gusta? ¿En tu país tienes posibilidades de comer comida española? ¿Alguna vez has cocinado comida española?

Tarea

Vas a explicarle a la clase cómo podemos preparar un plato típico español. También vas a expresar tu opinión sobre la comida española. El objetivo es conocer la cocina española y también la dieta mediterranea.

Proceso

1. La clase se divide en parejas.
2. Cada pareja elige uno de los siguientes grupos:
- Tapas y pinchos
- Primeros platos
- Segundos platos
- Postres
3. Buscad información sobre el grupo que habéis elegido
4. Contestad este cuestionario
5. Presentad a la clase su receta.
6. Proyectad un vídeo de la receta.
7. Entregad la receta por escrito al profesor.

Recursos

1. El cocinero fiel
2. Recetas españolas
3. Canal cocina
4. Dieta mediterranea
4. Ferrán Adriá
5. Karlos Arguiñano
6. Platos típicos españoles
7. Tapas y pinchos

Conclusión

Hemos conocido diferentes tipos de comida española, hemos expuesto el resultado de nuestras investigaciones y hemos contado nuestra experiencia y nuestras opiniones en torno al tema. ¿Qué te parece la diversidad gastronómica en España? ¿Qué presencia tiene la comida española en tu cultura?

domingo, 6 de julio de 2008

¡Qué calor! ¿Te apetece un gazpacho?



Ahora que vamos entrando en el caluroso verano, os propongo un refrescante plato, el gazpacho. Esta deliciosa sopa fria es una de las recetas más famosas de la gastronomía española. A pesar de que hay muchísimas variantes, el más conocido es el gazpacho andaluz que contiene como ingredientes principales, tomates, pimientos, pepino, cebolla, ajo, pan, en algunos casos, agua, aceite, vinagre y sal. Todo esto batido y bien frio constituye, quizás, la receta más refrescante y sana para soportar un caluroso verano andaluz.
Cualquiera lo podrá hacer en su casa, en casi cualquier parte del mundo, eso sí, imprescindible, un buen aceite de oliva. Además os dejo también un video donde podéis ver paso a paso cómo se prepara este veraniego plato, ahora ya no tenéis disculpa...
Vamos, chicos, manos a la obra, que no se diga que no sabemos hacer un simple gazpacho.



Y para que todo el mundo pueda participar en esta entrada os propongo que escribáis en los comentarios una receta típica de vuestro país o de la zona donde vivís, ya sea de verano o de invierno. Recordad que para escribir una receta podemos usar el presente, el imperativo, el infinitivo y la estructura "hay que".
¡Qué aproveche!

domingo, 6 de abril de 2008

Conmociones culinarias

Siempre me ha parecido interesante la idea de hacer una visita con mis estudiantes de Español Lengua Extranjera (ELE) al mercado central de mi ciudad, Salamanca. El plan me parece no solo atrayente para ellos, sino también para mí, puesto que puedo observar las diferentes reacciones de mis alumnos, según sus nacionalidades. Como véis la visita se puede convertir en todo un estudio de antropología. Por eso, casi cada vez que toca el tema “alimentos” nos acercamos hasta el mercado para dar un paseo por entre los puestos. Lo primero que les llama la atención es el olor, que algunos podrían calificar directamente de hedor. Acostumbran a ser bastante bien educados y se suelen aguantar la mueca en la cara como deferencia hacia mí.

Empezaremos por contar que la mayoría de mis estudiantes tiene alrededor de los 20 años y que jamás ha visto un animal entero muerto, las experiencias al respecto han llegado hasta el muslo de pollo que encuentran en las higiénicas barquetas del supermercado, o al trozo de carne que no saben ni a qué animal corresponde, ni de qué parte del animal proviene y por supuesto, ni lo quieren saber ni les importa. Esta visión provoca un shock en la mayoría. Así, en uno de los fructíferos paseos una de mis alumnas, italiana, de unos 20 años, se echó a llorar cuando vió la fila de conejos muertos y despellejados que se mostraba sin pudor en uno de los puestos. La pobre chica contó entre sollozos que su mascota era un conejo.

Superado el primer impacto vamos a por el segundo, la visión de las visceras. Sí, todo eso a lo que llamamos casquería y que hoy en día sólo se encuentra en el mercado o en la carnicería de tu barrio, por supuesto previo encargo. Sesos, corazón, riñones, hígado, callos, lenguas, rabos, patas y morros de ternera, sangre, orejas de cerdo… A algunos más que estar en un mercado les parece que son los protagonistas de una película de terror de serie B. El mismo sentimiento tendría un joven español. Las familias españolas de clase media ya no comen casquería y después de mucho pensar he encontrado algunos motivos por los que creo que esto sucede. A pesar de que en estos momentos la economía doméstica en el país no es en exceso boyante, se podría decir que en los últimos años el presupuesto familiar destinado a la alimentación ha aumentado y que muchas de las familias ya no tiene que “tirar de casquería” para llegar a fin de mes. También la dificultad, de la que hemos hablado más arriba, para encontrar este tipo de productos supone un obstáculo a la hora de incluírlos en la cesta de la compra. Por otra parte, aunque fuera fácil la adquisición del producto, ¿qué haríamos con él una vez en casa? ¿Qué porcentaje de hombres cocinillas y de mujeres madres de familia sabrían manipular el alimento? Y por último, ¿contaríamos con el tiempo necesario que el guiso requiere? Todo esto unido al colesterol que provoca la ingesta de casquería y a las hormonas que contiene, hace que ésta haya quedado relegada a la categoría de pincho, tapa o ración y que se pueda degustar sólo en los bares más tradicionales. Soy consciente de que mi generación, hijos de los niños de la guerra y de la postguerra, es la última en consumir este tipo de vianda en España.

Siguiendo con el relato que nos ocupa, y ya sobrepuestos a la segunda conmoción vamos a por la tercera. Ésta la suele descubrir el alumno más inquieto e independiente de la clase, ese que mientras tú estás explicando el proceso de desalazón del bacalao, está haciendo su propio paseo y vuelve pálido, demacrado, casi cadavérico, advirtiendo a los demás de lo que ha visto: “Hay muchos cerdos pequeñitos, muertos, juntos”. Se refiere a lo que en Segovia llaman cochinillo y aquí en Salamanca llamamos tostón, plato típico de la zona, por cierto. Todos nos dirigimos hacia el lugar de los hechos y hay alguien que ante la asombrosa visión dice horrorizado: “¡Parecen bebés!” Y en ese momento se produce una escandalera que provoca en la mayoría de los casos la mirada y la risa comprensiva de los comerciantes. Esta tercera conmoción no consiguen superarla y, normalmente, motiva la finalización de la visita.

A pesar de todos los suplicios a los que se ven sometidos a lo largo del paseo, la valoración siempre es positiva, porque son conscientes de que a una cultura también se la conoce por el estómago.

viernes, 4 de abril de 2008

La valiente Nicole





Esta mañana he estado en el mercado con mi grupo A2-2 formado por David, Hilary, Nicole, Sofia, Nizli y Kerstin, un grupo heterogéneo, empezando por la nacionalidad, dos ingleses, una estadounidense, una brasileña, una turca y una alemana, y siguiendo por la edad, desde los 18 a los 60. No es la primera vez que voy con mis estudiantes al mercado, creo que supone una actividad interesantísima, tanto para ellos como para mí, pero sí es la primera vez que los estudiantes interactúan con los vendedores. En una de las tantas pescaderías, una de mis alumnas, Nicole, la estadounidense, fue animada por la pescadera para que cogiera en sus manos un buey de mar y un bogavante vivos. La valiente Nicole no lo dudó ni un momento, ni corta ni perezosa alargó los brazos para tomar en sus manos los preciados crustáceos.
Aquí están las fotos para dejar constancia de los hechos.
Bravo por Nicole.

This morning I have been in the market with my group A2-2 formed by David, Hilary, Nicole, Sofia, Nizli and Kerstin, a heterogeneous group, starting with nationality, two British, one American, a Brazilian, a Turkish and a German , and followed by age, from 18 to 60. This is not the first time I go with my students to the market, I think that is an interesting activity, both for them and for me, but it is the first time that students interact with vendors. In one of the many fishshop, one of my students, Nicole, the American was encouraged by the pescadera for seized in their hands an ox sea and a live lobster. The brave Nicole did not hesitate a moment, arms lengthened to take into their hands the precious shellfish.
Here are the pictures to record the events.
Bravo Nicole.

lunes, 17 de marzo de 2008

Receta tortilla de patatas

El aceite de oliva

CÓMO UTILIZAR EL ACEITE DE OLIVA EN LA COCINA


En crudo, el Aceite de Oliva Virgen conserva todo el aroma y sabor de los zumos de fruta fresca, en ensaladas, salsas o aderezos en verduras. Asimismo, rociado en pan o tostadas o incluso sobre ahumados con aceitunas de mesa, carnes, bocadillos, embutidos, etc.

En las frituras y asados, el aceite de oliva virgen es la más estable de las grasas vegetales y no produce reacciones tóxicas cuando se le somete a fritura, asado o cocción, en condiciones normales. Más bien todo lo contrario, mejora las cualidades gastronómicas de los alimentos. Al freír, forma una capa fina y consistente alrededor del producto, que impide que absorba más aceite y permite retener todos los jugos. El aceite de oliva fríe y no cuece, como lo hacen otros.

El orden en el aliño

A la hora de aliñar la ensalada se debe seguir este importante orden: primero la sal, después el vinagre o el zumo de limón y por último el aceite. El aceite cubre con una capa los ingredientes de la ensalada evitando que los demás elementos del aliño penetren en ellos, por eso el aceite es lo último que hay que echar.

Además de los incontables platos en los que el Aceite Extra Virgen de Oliva es ingrediente esencial podemos crear con él las más simples, pero sublimes, composiciones. Éstas son nuestras sugerencias:

  • Aceite para mojar: se derrama un poco de Aceite Extra Virgen de Oliva en un plato o cuenco, se añade una pizca de sal y pimienta. Se moja pan de leña en el Aceite Extra Virgen de Oliva, acompañado por un racimo de uva fresca y... buen apetito. Es apropiado para acompañarlo, un vino tinto joven.

  • Pan untado: se cortan algunas rebanadas de pan de leña. Se rocían con Aceite Extra Virgen de Oliva abundante y una pizca de sal. Se puede tomar como merienda acompañado de una nueces.

  • Pan y aceite: se disponen algunas rebanadas de pan de leña en una bandeja. Se rocía con unas gotas de vinagre aromatizado y Aceite Extra Virgen de Oliva, vertido siempre en gotas, para crear una auténtica “obra de arte”, y pimienta verde triturada. Ponemos queso de oveja encima de las rebanadas y lo acompañamos de un vino tinto joven.

  • Salsa de yogur: se añade un hilo de Aceite Extra Virgen de Oliva, cebolleta, sal y limón exprimido en un tarro con yogur natural. Se puede usar la salsa conseguida para aderezar cualquier manjar a discreción, desde hortalizas a carnes.

  • Con quesos: Se vierte un hilo de aceite sobre quesos frescos, tanto de vaca como de oveja, con añadidura de ajedrea; el resultado es realmente asombroso.